Ahora que miles de mujeres y niñas están aisladas con sus agresores, me fue inevitable reencontrarme con el cuento de «La Bella y la Bestia», escrito originalmente por Gabrielle Suzanne Barbot de Villeneuve en 1740.
El cuento de Gabrielle para mí no es sólo un relato de hadas para adultos, es una metáfora del día a día de muchas mujeres y niñas, y ahora, debido al aislamiento social obligatorio en sus hogares, se hacen más evidentes las violencias que vivimos como género.
Pero hago énfasis: ellas ya vivían con sus agresores antes de la contingencia sanitaria: ya eran sus vecinos, los agresores ya estaban en los espacios privados, sólo que ahora conviven 24 horas con sus Bellas, las Bestias están en casa, el agresor está en casa, “lo personal es político” repetimos en las manifestaciones feministas, y lo “político es personal”.
Los cuentos relatan hechos reales, el cotidiano de hombres, niños, mujeres, niñas, animales… a metáforas con disfraces, con mensajes entre líneas, sutiles, la vida, el día a día, va envuelta en cuentos.
En México, la Red Nacional de Refugios (RNR) creó en el primer mes de confinamiento la campaña “Aislamiento sin Violencia” registrando 115 mil 614 llamadas de emergencia por violencia contra las mujeres, 5 mil 783 denuncias por violencia sexual, un incremento de 92.2% del acoso, 62.9% en el hostigamiento sexual, 25.6% de abuso sexual, 14.6% de violaciones y 117% de pornografía infantil.
Del 17 de marzo al 20 de abril se brindó atención telefónica a 2 mil 633 personas, de las cuales el 76.26% son mujeres que solicitaron acompañamiento ante las violencias machistas, el 19% de ellas ya había solicitado anteriormente apoyo gubernamental, sin recibirlo, porque lo personal no es interpretado como político, «son asuntos de pareja”.
Los tipos de violencia que se han perpetrado en este confinamiento hacia ellas son: 23% violencia emocional, 37% física, y 17% todas las formas de violencia (sexual, emocional, física, patrimonial, económica).
La RNR reporta que durante el confinamiento más de 367 mujeres han sido asesinadas, y al día, 3 mil 729 mujeres piden auxilio al verse involucradas en una situación de violencia de género, es decir, cada hora 155 mujeres están en riesgo.
El Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública también informó que hasta el 31 de marzo había ya 240 presuntos feminicidios, y por homicidio doloso 254 mujeres asesinadas.
Las llamadas relacionadas con incidentes de violencia contra las mujeres fueron 26 mil 171, 545 llamadas en marzo relacionadas con abuso sexual, 395 llamadas por violación, 22 mil 628 llamadas por violencia por parte de sus parejas, sólo en marzo.
Si escucháramos y leyéramos a los y las escritoras entre líneas, entre líneas encontraríamos nuestros días, los suyos, los de grupos, colectivos…
¿De qué hablaba Gabrielle?
Del aislamiento obligatorio de la Bella con la Bestia, un sujeto que al conocerle se muestra amable, encantador, generoso, y después violento, un monstruo encolerizado que quiso asesinar al padre de la Bella por cortar una rosa de su jardín, y que le chantajeó (violencia psicológica) para traerle a la Bella a vivir con él, intercambiando la vida del padre por la vida de su hija.
Este sujeto además esperaba que la Bella estuviera convencida de venir voluntariamente a su encierro, sin mostrarse obligada, sumisa, dócil y aceptar lo que la Bestia quisiera hacer con ella, incluido el estar aislada con él, aceptar la prohibición de ver a su familia, amistades, la gente que le quería (redes de apoyo) mientras le decía que le amaba, le escribía versos y le llenaba la jaula de obsequios y cubría sus necesidades básicas (proveedor).
Su único contacto “humano” permitido era el de la Bestia (así como ahora ante esta contingencia sanitaria el único contacto humano que tienen mujeres y niñas son sus agresores).
Conformándose con el único sujeto que habitaba su jaula, y agradeciendo lo poco, lo mínimo, la nada, la Bella llegó a pensar que la Bestia le amaba, se acostumbró a la Bestia.
La Bestia utilizaba la violencia psicológica y verbal, así como el chantaje emocional y la manipulación para que la Bella ni siquiera imaginara volver a ver a su familia, le amenazaba con suicidarse si ella no volvía, cuando le dio permiso de irles a ver (ante nuestra situación actual, la prohibición, chantajes y amenazas para comunicarnos con nuestros vínculos de confianza, o solicitar apoyo profesional por las violencias que vivimos).
Ante el aislamiento social, muchas mujeres y niñas, conviven 24 horas, 7 días a la semana, con sus respectivas Bestias, a quienes es necesario que identifiquen, y nombren las violencias que viven para poder visualizar activamente acciones que nos hagan salir de esta situación, incluso en esta contingencia.
Hay instituciones en cada estado que pueden asesorarnos para que el aislamiento sea vivido sin violencia y sin nuestros agresores.
Si te encuentras en una situación de violencia y vives en el estado de Colima, puedes llamar al 075 o al 911. También puedes llamar a los teléfonos del Centro Nacional para Prevenir y Erradicar la violencia contra las mujeres en el caso de Colima los números son (312) 161 2801; (312) 161 4446; y (312) 161 4447. Los horarios de atención son de 9:00 de la mañana a 9:00 de la noche para recibir asesoría y acompañamiento en situaciones de violencia.
Estamos observando las consecuencias de un país que ha ignorado, normalizado, justificado y permitido durante años la violencia de género ¿qué estrategias políticas se plantearán para que la justicia llegue a los espacios privados, esos que son invisibles?