El presidente estatal del PRI, Rogelio Rueda Sánchez, negó haber recibido «aportaciones indebidas» del Gobierno del Estado de Colima en el año 2015.
El lunes Perriodismo reveló que en diciembre pasado el Consejo General INE ordenó el inicio de un procedimiento administrativo sancionador y determinó multar con 4.4 millones de pesos al PRI por haber recibido 3 millones de pesos de siete dependencias del Gobierno del Estado.
A través de un boletín de prensa, el dirigente tricolor dijo que el 23 de diciembre de 2016 impugnó la resolución del INE ante el Tribunal Electoral pero aún está por resolverse.
En ese sentido lo que el INE observa, señaló, es que antes las aportaciones de militantes priistas que también eran servidores públicos, se les descontaba, previa autorización, vía nómina y era a través de las dependencias estatales que se entregaban al partido.
Rueda Sánchez explicó que en los estatutos del PRI se prevé que haya aportaciones de los militantes a su partido, esa es la forma de sostener la operación de los institutos políticos, para no depender exclusivamente de los recursos públicos.
Agregó: “No hay ninguna aportación indebida y en todo caso lo que se está dirimiendo en el Tribunal es si eso está lo suficientemente probado o no”.
Sobre que si el PRI no pudo comprobar los descuentos vía nómina a los militantes que eran trabajadores, Rueda Sánchez explicó que siempre se ha podido comprobar y que en este caso en particular, es el Gobierno del Estado, por cambio de administración, el que señala que tiene dificultades para probarlo porque varios de esos empleados ya no se encontraban laborando para el gobierno y se les dificultaba su ubicación.
Recalcó que el PRI, en cambio, siempre lo ha podido demostrar. Por ello dijo no tener duda que el Tribunal resolverá a favor del instituto político que él dirige. Añadió: “no solo estamos planteando ante el Tribunal las pruebas, los documentos que avalan nuestro dicho, sino la incongruencia de esta pretendida imposición de multa por el INE”.
El dirigente tricolor, comentó que el señalamiento del INE tiene dos vías: la primera es que hay una aportación de ente prohibido (en este caso las dependencias públicas); y otra a que no registraron en su contabilidad esos ingresos, pero advirtió que el PRI nunca registró dichos ingresos como una aportación de una dependencia pública, puesto que nunca existió, y lo que sí registraron fueron las aportaciones de cada uno de los servidores públicos que son militantes.
Rueda Sánchez recordó que incluso para apostar a la transparencia y evitar malentendidos, desde el pasado 25 de junio de 2016, el PRI arrancó con la campaña de recaudación de cuotas y aportaciones de militantes, las cuales se hacen a través de bancos y no de las dependencias estatales. Dicha medida, precisó, fue implementada antes de que el PRI fuera multado.