Dos semanas después de denunciar a través de un video la desaparición de su hijo Williams en Manzanillo, Ignacio Miranda Muñoz fue asesinado en Zapopan, Jalisco.
«¿Y si fueron ustedes y tienen un problema conmigo? ¡Vengan por mí! Les cambio mi vida por la de mi hijo. Díganme, cabrones, dónde me presento pero devuélvanmelo», expresó Miranda el 10 de diciembre pasado en una transmisión en vivo desde su cuenta de Facebook.
Visiblemente quebrantado, expresó su descontento hacia el gobernador Ignacio Peralta Sánchez y la alcaldesa manzanillense Gaby Benavides Cobos por la inseguridad generalizada en la entidad.
«Eso es Manzanillo. Ese es el pinche Manzanillo que dicen es seguro. Ese es el puto Manzanillo que dicen que no pasa nada. Ese es su puto Colima la que no le pasa nada. Esas son sus pinches autoridades de mierda que todavía se ofenden cuando uno les dice sus pinches verdades», exclamó.
«Respóndeme, gobernador ¿Dónde está el Colima seguro? Dime, Gabriela Benavides Cobos ¿Dónde está el Manzanillo al que no le pasa nada? Pinches diputados vendidos de mierda, ¿Por qué no hacen algo? ¿Por qué chingados dejan que se estén acabando a la gente?», continuó.
Según la información obtenida por él, su hijo fue levantado por unos individuos a bordo de un automóvil blanco el viernes 9 de diciembre alrededor de las 6 de la tarde en la calle Lázaro Cárdenas, afuera de una tortería.
De acuerdo a CNDigital, doce días después el joven Williams Miranda publicó un breve mensaje en su cuenta de Facebook en el que informó su regreso a casa.
«Para todos los que estuvieron en oración y pidieron mi regreso a casa quiero decirles que desde hace unos días ya estoy de vuelta con mi familia y desde lo más profundo de mi corazón les agradesco (sic) por ayudar a que se realizara este milagro.
«Por razones de seguridad no realizaremos más publicaciones pero les doy las gracias a todos y a cada uno de ustedes por preocuparse por mí», publicó.
El pasado lunes 26 de diciembre a las 4 de la tarde, Ignacio Miranda fue asesinado en el Hotel Villas Las Cañadas, en Zapopan, donde vacacionaba con su familia, informó la agencia Quadratín.
«A decir de testigos, Ignacio Miranda, de 46 años, bajó de su habitación para ir la tienda; hizo una compra, regresó y se sentó en una silla blanca de plástico junto a una ventana.
«En ese momento llegaron dos hombres y dos mujeres en una camioneta Odissey. Los desconocidos descendieron del vehículo, ingresaron a la recepción y dispararon a corta distancia en contra de su víctima. El hombre murió al recibir los impactos de bala en diferentes partes del cuerpo», consignó el medio.
De acuerdo a Juan Ramón Negrete —secretario de la Federación de Asociaciones de Periodistas Mexicanos— el fallecido fue agente de vialidad en Manzanillo y nunca estuvo ligado a ningún medio de comunicación, como se informó inicialmente en algunas páginas.