La diputada de Movimiento Ciudadano (MC), Leticia Zepeda Mesina, fue removida de la presidencia y la secretaría de dos comisiones legislativas del Congreso del Estado de Colima.
Con los cambios promovidos por las fracciones del PRI e independientes, Zepeda Mesina fue sacada como secretaria de la Comisión de Hacienda, Presupuesto y Fiscalización, la cual ahora es encabezada por el priista Santiago Chávez.
Asimismo, la emecista fue desplazada de presidenta a vocal de la Comisión de Vigilancia del Órgano Superior de Auditoría y Fiscalización Gubernamental (Osafig).
«Lo que está sucediendo son acomodos políticos, son jugadas políticas, son acuerdos que no toman en consideración al ciudadano», condenó la legisladora ayer tras aprobarse los cambios en el Pleno.
«Yo supongo que el espíritu de que esas comisiones es que englobaran todas las fuerzas políticas. Ya no estaré en Hacienda pero me comprometo a estar ahí presente, a contribuir, a observar, a señalar lo que encuentre que se pueda mejorar», anunció.
La diputada opinó que las elecciones del año 2015 determinaron que el Congreso estuviera integrado por un partido distinto al Ejecutivo para que «el desastre financiero en el que nos encontramos no se volviera a repetir».
«El deseo del ciudadano era que hubiera una fiscalización, que se enriquecieran las cuestiones financieras y de planeación con una oposición», indicó.
En su oportunidad, el coordinador parlamentario de los independientes, Nicolás Contreras Cortés, expuso que «los cambios constituyen la razón de ser que permea en todos los acontecimientos humanos».
Dijo que los cambios ya se habían vislumbrado desde la conformación de la bancada que ahora encabeza, por lo que no deben ser extraños.
«Ofrezco a todos mis compañeros apertura, disposición para acordar, atención para escuchar planteamientos y la mejor de las voluntades para trabajar juntos», expresó.
A su vez, el coordinador parlamentario del PRI, Federico Rangel Lozano, dijo que su grupo parlamentario y de sus aliados -PT, Verde y Nueva Alianza- es que «prevalezca siempre la razón sobre cualquier acción de visceralidad».