El desvío de 600 millones de pesos se realizó por instrucciones del Gobernador Mario Anguiano Moreno, dejó entrever Clemente Mendoza Martínez, ex secretario de Finanzas y Administración.
En rueda de prensa, el ex funcionario lamentó que el titular del Ejecutivo lo haya acusado «de manera directa de los malos manejos en mi periodo al frente» como el desvío de 600 millones de pesos de fondos federales para el pago de servicios personales «aseverando que se ejercieron sin su autorización ni conocimiento».
«El de la voz nunca actuó fuera del marco de la ley, todas las decisiones presupuestarias se efectuaron con apego de la ley y bajo la instrucción del Gobernador», puntualizó.
Clemente Mendoza afirmó que al estar frente a la Secretaría de Finanzas y Administración (SFA), entre agosto 2013 y septiembre 2014, actuó siempre «bajos los lineamientos y métodos» de Mario Anguiano.
«Todos mis actos al frente de la Secretaria fueron apegados a las leyes y a las instrucciones del señor Gobernador», reiteró.
«Es claro que se están buscando culpables de este déficit financiero y se lo quieren imputar a un servidor», enfatizó.
«El licenciado Mario Anguiano es una persona que merece todo mi respeto por la investidura que representa, sin embargo, no coincido en las decisiones y declaraciones vertidas hacia mi persona, motivos que fueron causal fundamental para tomar la decisión de renunciar al cargo de secretario de Finanzas el pasado 9 de septiembre de 2014», comentó.
Negó que haya sido despedido, sino que él mismo presentó su renuncia «por tener diferencias con el Ejecutivo en asuntos de la misma Secretaría, las cuales me reservo».
Sin embargo, refirió que lo único en lo que coincide con el mandatario colimense es que se realice una verdadera investigación por parte de los órganos fiscalizadores, donde él está dispuesto a colaborar.
«Si se realiza revisión a fondo, eficiente, sin protección alguna a funcionarios públicos, la verdad surgirá, y las estrategias para sanear se darán con mucha facilidad», concluyó.