Bitácora reporteril
El verdadero rostro de Jorge Luis Preciado, que refleja su personalidad, no fue el que mostró en el debate, cuando paradójicamente se puso una máscara para combatir la corrupción, sino el del domingo pasado cuando, con semblante torvo, amagó y dijo que la manifestación que culminó en el Rey Colimán sería la última movilización pacífica.
Decir que hubo fraude en la elección para gobernador, equivale a descalificar todo el proceso electoral 2015, tanto en las diputaciones locales, federales como en las mismas alcaldías. Jorge Luis dice que tiene elementos para impugnar la elección, que los presente, entonces, ante las instancias pertinentes.
¿Por qué, si está tan seguro de sus “pruebas sólidas”, utiliza un discurso que incita el odio entre las personas? Probos periodistas en el estado siguieron de cerca este proceso electoral y descartan el fraude que pregona Jorge Luis, aun los mismos correligionarios del ex candidato del PAN a la gubernatura expresaron que el conteo voto por voto se ciñó a los principios de legalidad.
Las actas estuvieron firmadas por los mismos representantes del PAN. Incluso Jorge Luis Preciado aseguró, con las mismas actas de casilla que ahora descalifica, que el triunfo era suyo. Expone que inflaron las casillas con más de mil votos, pero no dice que muchos de estos sufragios corresponden a las casillas especiales y una parte, en menor cantidad, a los votos en el extranjero.
Su discurso ha sido, en los últimos días, incongruente y veleidoso, y va dirigido no aclarar sino a enturbiar más el panorama político y social. En un principio aseguró que cómo era posible que perdiera la gubernatura si su partido fue el que más recibió votos, obviando el voto diferenciando y descalificando a Indira Vizcaíno, que representó esta modalidad, ya que las personas votaron por ella y no por el PRD (fue la alianza chicharronera, dijo el panista).
Así fue en los hechos: hubo un voto de castigo al PRI, por supuesto; pero en lo correspondiente a gobernador, la gente que votó prefirió a Ignacio Peralta que a Jorge Luis Preciado. Y creo que esto se debió, en gran medida, a la personalidad del panista, que el pasado domingo quedó al descubierto.
Dos puntos: Los próximos tres años serán los más largos de Ignacio Peralta, virtual ganador de la gubernatura. Sin el congreso, será poco lo que podrá hacer en su primer trienio; a menos que demuestre capacidad de gestión y cabildeo.