“Yo no voy a firmar y no voy a renunciar”, advirtió el presidente del Comisariado de Bienes Comunales de Zacualpan, Carlos Guzmán Teodoro, en la asamblea celebrada este jueves por la mañana.
Minutos antes de suspender la sesión por falta de quórum -pues sólo asistieron 66 de los 307 comuneros-, la asambleísta Epitacia Zamora Teodoro intentó entregar un escrito a Guzmán Teodoro para solicitar la destitución de la dirigencia comunal como único punto a tratar en la segunda asamblea.
Sin embargo, el presidente se negó debido a que el orden del día para la segunda convocatoria debe ser el mismo que la primera sesión. En este caso se trata del informe de labores, la declaración de “Zacualpan, libre de minería”, y la remoción del cuerpo directivo de la asamblea.
La negativa de Guzmán Teodoro calentó los ánimos de los comuneros y de otros habitantes de la comunidad, quienes exigieron su renuncia inmediata para evitar mayores prolongaciones en el tema minero. De igual forma, lo acusaron de de ser un “títere” de la delegada de la Procuraduría Agraria, María Elena Díaz Rivera.
También cuestionaron la ausencia del Comité de Vigilancia y la falta del libro oficial de actas pues el registro de esa asamblea se estaba realizando en un cuaderno común.
En su oportunidad, Guzmán Teodoro aseguró que el libro de actas está temporalmente en el Tribunal Agrario Unitario para servir como prueba de una demanda que enfrenta por el conflicto de unas tierras de la comunidad. Asimismo, indicó que actualmente está en trámite un amparo contra la sentencia que le obliga a pagar 100 unidades de salario mínimo de multa.
Sobre el Comité de Vigilancia –el cual debería regular el actuar de Guzmán Teodoro como dirigente- , informó que quien lo preside se encontraba enfermo y por eso no pudo asistir a la asamblea. Sin embargo, habitantes de Zacualpan negaron la versión asegurando que el propio comité abandonó sus funciones derivado del proceder unilateral del representante comunal.
Los pobladores exigieron a Guzmán Teodoro firmar en ese mismo momento su renuncia, pero sólo recibieron como respuesta que será en la próxima sesión de la asamblea cuando se vote su destitución.
Durante la sesión de este día no hubo presencia de elementos policiacos. La segunda asamblea se realizará el domingo 23 de diciembre a las 10 de la mañana; según el reglamento, ésta se celebrará con la cantidad de comuneros que asistan sin necesidad de superar la mitad más uno.
El 2 de febrero pasado, la delegada Díaz Rivera suspendió la asamblea debido a la inconformidad de los comuneros quienes exigieron la integración de dos de sus demandas al orden del día.
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